Nuestros Tratamientos Estéticos:
El Drenaje Linfático Manual y la Estética
El Drenaje Linfático Manual está indicado en todos los tratamientos de belleza, ya que como técnica desintoxicante y equilibrante prepara el tejido para potenciar cualquier terapia estética.
Puede aplicarse antes, durante y después del tratamiento dependiendo de la finalidad del mismo.
Ayuda a mantener el equilibrio de los líquidos orgánicos, los cuales se están renovando constantemente. Esto da lugar a una mejor nutrición celular y ayuda a la regeneración de tejidos.
Celulitis
Permite el reblandecimiento de nódulos fibróticos, e interviene en la eliminación de células adiposas.
La celulitis es un proceso de alteración del tejido conectivo, producido por una disminución de la circulación linfática.
El drenaje linfático manual actúa movilizando la linfa y ayudando a eliminar los desechos.
Acné
Los tratamientos cosmetológicos, aún siendo necesarios, tienen un efecto secundario de vasodilatación a nivel de la dermis. El DLM contribuye a acelerar el proceso curativo, potenciando el tratamiento estético.
El acné es una inflamación del folículo, producida normalmente por el sistema hormonal.
El drenaje linfático manual contribuye a acelerar el proceso curativo del acné por su efecto drenante, purificante y sedante.
Flacidez, Arrugas faciales
Produce una regeneración celular que mejora en pocas sesiones el aspecto de la piel.
El drenaje linfático manual se basa en la aplicación de masajes que activan el sistema linfático, eliminando ciertas sustancias y líquidos que pueden perjudicar la piel. Por otra parte, esta técnica te ayuda a suavizar las arrugas del rostro, relajándolo y suavizándolo.
Rosácea
El DLM favorece la mejora de las rojeces faciales, del edema localizado y regenerando y alternando los tratamientos dérmicos.
La rosácea y la cuperosis son afecciones dermatológicas que congestionan y enrojecen la piel. La aplicación del DLM hace que mejoren las rojeces faciales, regenerando y alternando los trastornos dérmicos.